¿Cuántos días dura la carne en la congeladora del refrigerador?
El refrigerador, un infaltable de todas los hogares que se ha transformado, hace bastante tiempo ya, en un importante aliado del estilo de vida contemporáneo. Algunos incluso van más allá, sumando congeladoras verticales tal como esas que se suelen ver en los negocios, habiendo también unos modelos verticales bastante útiles si de aprovechar el espacio se trata.
Ya sea en la parte superior de un refrigerador tradicional o en una congeladora independiente, el proceso de congelado es muy provechoso para, paradójicamente, prolongar la vida de los alimentos crudos y para conservar diversos platos preparados que quedan listos para ser consumidos con sólo calentarlos unos pocos minutos.
La carne de novillo y el congelado
Uno de los alimentos que se lleva muy bien con el frío, es la carne de novillo. ¿Cuántos días dura la carne en el refrigerador? La respuesta a esta pregunta depende de varios factores, como los grados a la que será guardada, si está o no sellada al vacío, si se encuentra cocida o cruda y si está entera, troceada o molida.
Generalmente una pieza de carne de novillo viene sellada al vacío, es decir, se ha extraído la mayor parte del aire presente en la bolsa de envasado. Esta presentación de por sí ya ayuda a preservar por mayor tiempo los alimentos, conservando propiedades como el sabor, color y textura al mantenerlos aislados de los microorganismos encargados de la descomposición presentes en el ambiente.
Una carne de novillo entera congelada sin estar envasada al vacío suele durar 6 meses, siempre y cuando se conserve entre -12 y -18 grados celsius. Si está troceada o molida su duración baja a entre 3 y 4 meses.
Ahora bien, si la carne de novillo envasada al vacío se congela sin romper el envase original, su tiempo de duración se prolonga considerablemente, siempre y cuando sea congelada antes de su fecha de caducidad. Son alrededor de 18 meses los que la carne de novillo se mantiene apta para ser consumida.
Distinto es si la carne de novillo ha sido cocida antes de someterla a un proceso de congelamiento. Como ha enfrentado previamente factores como altas temperaturas y deshidratación, su tiempo de duración baja en la congeladora en comparación con su estado crudo. Son 2 a 3 meses los que la carne se mantiene apta para el consumo humano cuando está cocida y posteriormente congelada.
Otras carnes
No sólo la carne de novillo puede ser sometida a los beneficios de las bajas temperaturas. El resto de las carnes crudas también se llevan muy bien con el frío. Tal es el caso de la carne de pollo y pavo, que congeladas pueden durar hasta 6 meses si las envolvemos en algún plástico adecuado para alimentos. Ahora bien, si estas carnes se encuentran envasadas al vacío, la duración alcanza los 18 meses a menos de -12 grados celsius.
La carne de cerdo, por su parte, alcanza los 4 a 6 meses en la congeladora y si está molida son 3 a 4 meses los que se mantiene apta para ser consumida. Si el cerdo ha sido cocinado previamente, son 2 a 3 meses los que resiste en la congeladora para ser consumido.
Una carne menos común en las despensas, pero no menos sabrosa y versátil que las anteriores, es la de cordero. Congelada y al vacío puede alcanzar los 18 meses, mientras que sólo envuelta en plástico su vida culinaria alcanza los 6 meses. Y si fue cocinada antes de congelarse, su duración se extiende por entre 2 y 3 meses. Básicamente, el cordero se comporta de manera muy similar a la carne de novillo cuando es sometido al congelamiento.
Tips para tomar en cuenta
Para no perder de vista el tiempo que las carnes se mantienen en el congelador, algo muy aconsejable es marcarlas con la fecha. Para esto nos puede servir algún lápiz permanente y alguna especie de cinta o papel que podemos pegar en el envase (nunca marcar las carnes directamente).
Otro dato a tener en cuenta es que, si las carnes no vienen envasadas, lo más adecuado es guardarlas en alguna bolsa plástica apta para alimentos. Se aconseja el plástico por ser un material impermeable que impide que la humedad y el frío deterioren las características inherentes de los productos.
Finalmente, el proceso de descongelado también es importante. Los especialistas señalan que, para mantener el sabor y la textura de las carnes, lo que se debe hacer es descongelar las carnes paulatinamente “bajándolas” a la parte conservadora del refrigerador la noche anterior a ser cocinadas. También es aconsejable no someterlas a los programas de descongelamiento de los microondas, para evitar cualquier cocción no deseada.